casi 14 de Febrero

Te ríes por fuera, pero por dentro estás triste.

Bah, otro invento del Corte Inglés, pero te quedas mirando serio los corazones rojos de los escaparates.

No te mientas, en el fondo quieres que ese maldito ángel te atraviese con su flecha sentado en una cafetería con una chica guapa a tu lado y que llegue a empalarla a ella al mismo tiempo.
Sin anestesia, sin pensar.
Aunque todo se ponga rojo,
Rojo chanel, 
Rojo beso eterno.
Rojo sangre enamorada.
Sabes que por una vez, rogarías por ese amor correspondido que no es ciego, sino educado, puro, respetuoso que te haría recortar cartulinas coloradas el sábado de carnaval.
Sin parar de sonreír, como un niño la mañana de Reyes.

Piensas en Kubrick, y en una sala empapada por una ola roja que arrastra una butaca.
En poder disfrutar de esa película con ella en un sofá compartiendo manta.
Loco por abrazarla si tiene miedo.
Sentirte Mazinger Z.
Por olerla, rozarla.
Y recordar un febrero sin igual.
Porque en el fondo,
tienes mas miedo que yo.